Cuando yo llegue a Atlanta en 1984, necesitaba encontrar una parroquia para ir a misa. Primero iba a Atlanta a la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, y después encontré a San Mateo más cercano. En ese tiempo no avía misa en español, pero no me importaba que no entendía mucho el inglés. Mis hijos los tenía pequeños y también me los traía porque necesitaban hacer sus sacramentos.
Después con los anos, con mucho esfuerzo de la comunidad hispana y la ayuda de la archidiócesis, pudimos celebrar misa por primera vez en español. De primero teníamos que ir a traer el sacerdote y después llevarlo a su casa. El párroco en aquel tiempo, el P. Caffrey, nos enseno como preparar todo para la misa y como limpiar y guardar todo. También no había ministerios de monaguillos, lectores, o de Eucaristía. Entonces el Padre nos desia si necesitaba ayuda y a mí me tocaba ser la primera a quien acudía.
Las misas en español fueron posibles atravesó de la ayuda de muchos sacerdotes hispanos del área. Primero fue el P. Zalazar, después el P. Vicente Pena, y una vez hasta el P. Zarama, ahora Obispo. El padre pepe fue el que estuvo más tiempo y nos ayudó mucho a establecer la comunidad hispana en San Mateo.
Después de algunos años más, por primera vez tuvimos la dicha de celebrar la fiesta de la Virgen de Guadalupe y de hay fue creciendo la comunidad mas y mas.